El mayor orgullo de los Estados Unidos en la
literatura, Edgar Allan Poe, murió
en la total miseria. Incluso una de las causas de su muerte, que hasta la
actualidad está envuelta en el misterio, pudo ser el
hambre.
Poe fue el primer escritor estadounidense en alcanzar
fama mundial con sus magnificas obras de terror, su extraordinario poema El cuervo y sus escasos pero excelentes
relatos policíacos protagonizados por C. Auguste Dupin.
En estos tiempos los autores más leídos como J. K. Rowling o Dan Brown poseen enormes fortunas, por lo que es imposible imaginar
al muy leído Edgar Allan Poe sin un dólar en los bolsillos y acosado por sus
deudas.
El problema financiero de Poe se debió,
principalmente, a que sus populares relatos se reproducían en diarios, donde
los leían miles de personas, pero a él eso no le redituaba ni un centavo, ni
siquiera para alimentarse y financiar su alcoholismo.
El libro electrónico puede propiciar que vuelvan a
existir autores con la desgracia de Poe. Un libro puede ser muy popular en
Internet, donde miles de personas pueden descargarlo gratis, y eso al autor le acarreará
mucha fama, como a Poe, pero nulos ingresos, también como a Poe.
La diferencia de estos tiempos, que sería crucial, es que la fama conseguida en Internet podría brindarle a un escritor la posibilidad de vender bien sus obras. Una vez que un libro es famoso, su autor tendrá infinidad
de oportunidades que en los tiempos de Poe eran inimaginables.
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