Desde hace tiempo la secretaria de Estado Hillary
Clinton había anunciado que de ganar Barack Obama las elecciones presidenciales
de su país no lo acompañaría en un segundo mandato. Durante las últimas semanas
la pregunta fue quién sería su sucesor.
Hoy se reveló que el elegido será el demócrata John Kerry,
antiguo aspirante a la Casa Blanca
Kerry sustituirá a una cansada Clinton en un difícil momento
para las relaciones internacionales de los Estados Unidos. Aunado a la crisis económica
internacional, las crisis sociales de los países árabes y la siempre
izquierdista Latinoamérica le garantizan uno período de cuatro años muy
agotador.
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