Una de las rarezas que acompañan al Premio Nobel de
Literatura Gabriel García Márquez,
es que es un gran amigo de Fidel Castro
y al mismo tiempo del expresidente de los Estados Unidos Bill Clinton.
Clinton es un gran admirador de la más aclamada novela
de Gabo, Cien años de soledad, al grado de considerarla la mejor novela jamás
escrita en lengua española.
Aprovechando su paso por Colombia para promover su
fundación, Clinton se presentó en la casa de García Márquez en Cartagena de Indias. Vestido
de manera informal y totalmente envejecido, el hombre que en la década de los
90s fuera el más poderoso del mundo se dejó fotografiar sonriente mientras
saluda al más representativo de la izquierda de todos los escritores
latinoamericanos.
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