España no pudo sumar un Maracanazo a su lista de trofeos. Incluso se quedó demasiado lejos
de poder lograrlo. Brasil en su cancha le pasó la aplanadora por encima a una furia roja que deslució durante todo el
partido, que falló un penalti y que perdió a un hombre por hacerse expulsar:
Gerard Piqué.
Con dos goles de Fred y uno de Neymar, más una
espectacular salvada de David Luiz y dos de Julio César, Brasil le puso espectáculo
al partido, sometió a España y desde el principio del segundo tiempo apartó la Copa Confederaciones
España sencillamente no pudo brillar. Un gol
tempranero le bajó todos los ánimos a los once de la furia roja. Y cuando más necesitaba un gol para volver al partido,
Sergio Ramos falló un penalti que pudo haber si no cambiado la historia cuando
menos aminorado la humillación.
Piqué, con una Shakira entristecida entre los
espectadores, cerró la lista de los errores de España al tener que frenar a un
rápido Neymar con una falta que le costó muy merecidamente la tarjeta roja.
Brasil, con un torneo perfecto, dejó la copa en casa y ya dio un aviso de lo
que podría ser, también en su casa, la Copa
Mundial
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