Hace unos
días, el dictador norcoreano Kim Jong-un ordenó apuntar su artillería de largo
alcance hacia bases norteamericanas en respuesta a los ejercicios militares
realizados en conjunto entre la fuerza aérea de Estados Unidos y la de Corea
del Sur.
Ahora la
tensión ha aumentado. Furioso porque bombarderos estadounidenses aparentemente
sobrevolaron el territorio de Corea del Norte, Kim Jong-un ha dado la orden a su ejército de
alistarse para atacar en cualquier momento.
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