Para alguien que ha leído más de tres libros en su vida la pregunta sí habría sido fácil, pero para Enrique Peña Nieto fue como si le hubieran echado una bomba encima. Entonces apenas era precandidato a la presidencia, y se pensó que su pésima, errónea y titubeante respuesta echaría al suelo su campaña.
Las parodias
y las burlas le llegaron de todo México, y la noticia dio la vuelta al mundo. ¡Un
candidato a presidente que no podía siquiera mencionar tres libros que había leído!
El estigma de ignorante todavía no se lo ha podido quitar de encima, y se prevé
que no va a quitárselo nunca.
Pero a
fin de cuentas Peña Nieto llegó a presidente y la pregunta se hizo famosa en su
país. Quizás a él no le gusta escucharla porque le trae un mal recuerdo, pero
en México, desde entonces, muchas veces, cuando es entrevistado un político, al
principio o al final de la entrevista, siempre le preguntan por los tres libros
que han marcado su vida.
Actualmente
ya todos los políticos mexicanos se la saben, y los que no lo habían hecho sin
duda ya se apresuraron a leer tres libros. En los días en que la pregunta era obligatoria
para cualquier celebridad de la política mexicana, se la hicieron hasta al
entonces presidente, Felipe Calderón.
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